Teñir el cabello es algo que resulta muy práctico y favorecedor por cuanto le permite al cabello un cambio de look e iluminar el rostro si te decides por un color más claro de tu tono natural, pero el cabello puede resultar dañado si no le das el cuidado necesario posterior al tinte, porque los primeros días luego de teñirlo son vitales para evitar la resequedad y la pérdida del brillo natural.
No te expongas al sol durante dos días después de haberte teñido, y si haz de hacerlo usa una gorra y sombrilla, eso permite no quemar el cabello que acaba de ser teñido. Durante la semana primera de haber teñido el cabello, mantenlo hidratado con cremas hidratantes para peinar así como usa más acondicionador para cabello teñido. No olvides cambiar tu shampoo de uso diario a uno del color que estás teñida y para cabello con procesos de teñido. Una mascarilla natural para hidratarlo vendrá estupendo. Y recuerda que a la 4a semana debes recortar las puntas y teñir las raíces.
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